Más que un ave, más que un avión… más que una cara bonita al lado de un tren. (Otro modo de ver las cosas).

Los cómics o historietas permanecen hasta el día de hoy como un medio marginado por las masas y relegado a una fama de ser sólo para niños… todo esto a pesar de la maduración del medio durante los 80´s y 90’s (sin que ello lo libre de los muchos defectos que en su capa más comercial sigue teniendo).

Los estrenos globales de súper producciones basadas en los personajes más emblemáticos del medio en algo han servido para popularizarlo y ganar algo de favor de parte de las masas para sus personajes e historias, pero poco ha servido para dejar de lado el estigma social de quien dedica tiempo a leer cómics como tales.

Poco conocida es la calidad de muchos trabajos dentro del medio y de grandes autores de la talla de Neil Gaiman, Alan Moore, Grant Morrison, Warren Ellis y un largo etcétera, que han volcado su imaginación y su ser en la creación de historias y personajes que trascienden las así vistas como limitaciones del medio, hasta levantarse para competir con medios más elevados y, a los ojos de muchos, quizás incluso ganarse un lugar entre ellos.

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De la misma manera, aún dentro del mismo medio del cómic y sus consumidores, un personaje sumamente menospreciado yace en la forma del primer superhéroe de la historia, Superman, a quien su así percibida y bien ganada fama de moralista y siempre correcto héroe que se forjó durante las primeras décadas de su existencia lo mantienen, aún cuando no necesariamente lo sigue siendo, como un personaje simple, acartonado y unidimensional…

Todo lo anterior enmarca el estreno en Abril de 2001 del disco de Five for Fighting (John Ondrasik), America Town, que incluía entre su contenido una canción llamada «Superman (It’s not easy)», misma que, si la escuchan sin poner atención, podría pasar desapercibido que su letra pretende representar los pensamientos de Superman y lo expone como un alma torturada, triste y frustrada por vivir en un mundo artificial que lucha por defender mientras busca en su interior lo mejor de él… a la vez que lamenta pertenecer a otro mundo, uno que nunca podrá conocer…

Tras escuchar la canción, la perspectiva del personaje cambia, pues es totalmente consistente con su historia y motivaciones, e incluso algunos extractos del canon de sus historias apoyan la letra de la canción, aunque las palabras exactas nunca hayan sido pronunciadas…

A modo de expandir la importante habilidad de ver más allá de la superficie de las cosas, a continuación se quedan con la canción antes mencionada, que espero disfruten porque, independientemente de su temática, musicalmente es hermosa.

Gracias por leer.

En la era del conocimiento… ¿existe la cultura del conocimiento?

*Artículo originalmente escrito para «Los Editoriales»*

Los sucesos recientes con respecto a la ley SOPA, el cierre de Megaupload y el creciente conflicto entre los empresarios del entretenimiento convencional contra los de Silicon Valley en el que ambos defienden sus intereses económicos, pero los primeros no temen llevarse entre las patas la apertura y estabilidad de Internet y derechos básicos de sus usuarios han dejado claras muchas cosas para quien está dispuesto a verlas.

El conflicto gira alrededor de la piratería y la violación de los derechos de autor y de hasta dónde es justo llegar para salvaguardar la propiedad intelectual y cuánto vale dicha protección en comparación con los derechos de los cibernautas.

Pero ésta lucha tiene muchos matices, el primero de ellos es la actividad en sí misma… todos los grandes conglomerados de empresas en posesión de derechos de autor (no necesariamente sus creadores, sino quienes, en la mayoría de los casos, pagaron por esos derechos) claman estar perdiendo dinero (de la misma forma que claman poder cuantificar dichas pérdidas).